El 21 de julio de 2001, el Atlético de Madrid realizó el primer entrenamiento en el Estadio Vicente Calderón. Su ayudante, Marina, y el preparador físico, Paredes, dirigieron el entrenamiento. Luis se incorporó paulatinamente al trabajo del equipo a medida que se restablecía de su dolencia. El establecimiento se transforma en uno de los importantes de Argentina, produciendo el 60 % del vino que se consumía en el país y también exportando parte de producción, llegando sus vinos desde Italia.